Los diferentes exámenes que desarrolla el Ceneval impactan en la vida académica, profesional y laboral de las personas que los sustentan, por lo que el Centro hace suya la responsabilidad social de garantizar su calidad. Para lograrlo, cuenta con su propia metodología, con base en la cual documenta, sustenta, sistematiza y estandariza los procesos que lleva a cabo.
Dicha metodología está conformada por los siguientes procesos.
Debido al impacto que tienen las decisiones tomadas en cada una de las pruebas, su construcción, evaluación, análisis y empleo requieren de profesionales, tanto de conocimientos especializados, como técnicos.1 Es por ello que, en cada proceso, principalmente en los primeros, participan comités de expertos en el contenido de cada examen, quienes trabajan de manera conjunta con personal del Ceneval.
A partir de cada proceso se obtienen evidencias para comprobar la validez, confiabilidad y equidad de los instrumentos de evaluación. En el diseño de la evaluación (proceso I) el producto final es el perfil referencial, el cual responde a preguntas relevantes como cuál es el objetivo y propósito de la prueba, a quién está dirigida, cómo se calificará, entre otras.
En la delimitación del objeto de medida (proceso II) se establece el contenido de la prueba, lo cual se plasma en la estructura del examen y especificaciones de los reactivos. Con estas últimas se construye el banco de reactivos (proceso III), en el que especialistas los redactan, validan y revisan.
Una vez que los reactivos fueron revisados conceptual y técnicamente, se verifica su calidad a partir de una aplicación piloto y de análisis cualitativos y cuantitativos, tanto de los reactivos como de la prueba completa (proceso IV). Con aquellos que cumplen con la calidad requerida, se conforman las versiones de la prueba que se aplicará (proceso V). Asimismo, se planea la logística para la distribución de material y aplicación (proceso VI). A partir de los resultados de los sustentantes, se llevan a cabo procesos de calificación automatizados o por juicios de expertos (proceso VII). Posteriormente, se emiten los reportes de resultados, ya sea individualmente o por institución (proceso VIII). Finalmente, se elaboran materiales, tales como las guías de estudio, manuales técnicos, publicación de información en la página web, entre otros (proceso IX). Esto último se considera transversal, ya que se va elaborando dicho material durante todos los procesos.
Tal como se observa, el desarrollo de instrumentos de evaluación con base en la metodología Ceneval permite asegurar su calidad; durante el proceso se ven involucrados expertos en contenido y personal técnico del Centro con el único objetivo de que las pruebas cumplan con estándares que den cuenta de su validez, confiabilidad y equidad.
1 Allalouf, A. & Alderoqui-Pinus, D. (2012a). Guest Editorial: Dissemination of Measurement Concepts and Knowledge to the Public. Educational Measurement: Issues and Practice, 31(2), 1.