El proceso de validación de cualquier instrumento de medición requiere evidencias que, por un lado, reflejen la coherencia entre el marco teórico y la información que se recoge, y por otro, respalden las inferencias que se hacen a partir de sus resultados. Estas evidencias pueden obtenerse de cinco fuentes de validez:
- De contenido: Valoraciones y juicios de expertos respecto a la coherencia entre la prueba y el constructo que se desea medir.
- De procesos de respuesta: Se detectan diferencias en el desempeño de subgrupos de examinados, entre otros aspectos.
- De relación de los puntajes con variables exógenas: Se analiza la asociación de variables ajenas a la prueba con los puntajes obtenidos.
- De las consecuencias de la evaluación: Se refiere a los efectos de extender la interpretación de los puntajes, asegurando coherencia entre la interpretación de los resultados y las decisiones tomadas a partir de ellos.
- De la estructura interna: Determina el grado de homogeneidad entre los reactivos y se realiza mediante un análisis de dimensionalidad. Este análisis permite obtener el número mínimo de factores que describen el contenido de una prueba, a través del modelo factorial, que se relaciona estrechamente con los principios de la teoría clásica de los test. Sin embargo, estos factores no deben considerarse equivalentes, ya que el modelo factorial asume que una variable observada es resultado de una relación lineal que representa la contribución de variables latentes (factores o dimensiones), centrándose en modelar el puntaje verdadero y un error de medición.
El análisis factorial puede ser exploratorio o confirmatorio. Ambos proporcionan significado a los factores latentes y contrastan la estructura planeada con la estructura estadística. En el caso de las pruebas del Ceneval, se recurre al análisis confirmatorio, ya que cuentan con un marco de referencia y una estructura teórica que se verifica empíricamente con cada aplicación.
Para conocer el texto completo, lo invitamos a leer el artículo “¿Para qué sirve el análisis de dimensionalidad?”, en el noveno número de la revista Ceneval Investiga.